Los datos del mercado laboral estadounidense es uno de los aspectos más importantes para el presidente Biden para hacerle frente a la posible recesión económica.
Según los datos de agosto, la tasa de desempleo en Estados Unidos sufrió un incremento de dos décimas, pasando a 3,7%, aunque el mercado laboral continúa siendo “sólido”, con cifras similares a las vistas antes de la pandemia.
De acuerdo a los datos publicados recientemente por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS), el número de desempleados subió durante el mes de agosto en 344 mil personas, llegando a los 6 millones.
La creación de empleos disminuyó su marcha el pasado mes. Al finalizar el mes de agosto se registraron 315 mil nuevos puestos de trabajo, en comparación al más de medio millón registrado en julio, cifra que parecía marcar el regreso a los niveles pre-pandémicos, cuando la tasa de desempleo era del 3,5%.
Dichos números suponen un “relativo enfriamiento del mercado laboral” en Estados Unidos, ante los datos esperanzadores de julio.
En base a un análisis sobre el mercado laboral de la primera potencia mundial, el desempleo ha estado sometido a bajas persistentes desde que en abril de 2020 marcó su máximo del 14,7%, aumentando solamente en dos ocasiones durante este tiempo, no más de una décima.
La creación de 315 mil puestos de empleo en agosto también resulta estar por debajo del promedio de los empleos surgidos entre marzo y junio, cuando surgieron 388 mil puestos de trabajo, aproximadamente.
“Buenas noticias” para Biden
Uno de los motivos de orgullo del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, es la gran fuerza del mercado laboral en el país, además de ser uno de los aspectos que más destaca para hacer frente ante la temida recesión económica.
Después de conocerse los datos dados por la BLS, el mandatario se refirió a ellos como “buenas noticias”.
Biden dejó claro públicamente que “la gran máquina estadounidense de puestos de trabajo continúa”. Asimismo, el Presidente recordó que desde que asumió el cargo, se han creado un promedio de 10 millones de nuevos puestos de trabajo, con “el crecimiento más rápido en toda la historia de Estados Unidos”.
Desde el segundo trimestre de este 2022, el país está en recesión técnica al registrar de manera consecutiva caídas del PIB. Sin embargo, desde el Gobierno se insiste en que no puede considerarse que el país esté en recesión a la vista de indicadores económicos como el del empleo.
“Estamos a la presencia de algunas señales de que la inflación puede estar empezando a disminuir”, indicó Biden, argumentando esto luego de que los precios bajaran seis décimas en julio, con una tasa interanual de 8,5%.
A pesar del optimismo del primer mandatario, el enfriamiento se conoce días siguientes a que el presidente de la Fed, reconociera en un discurso en el foro de Jackson Hole que restaurar la estabilidad de precios “probablemente requerirá” mantener una postura monetaria “restrictiva durante algún tiempo”, situación que desde ya los analistas presumen tendrá consecuencias en el mercado laboral.